Sección: Filandón violeta
Lunes, 19 de febrero. 2024
DECLARACIÓN DE INTENCIONES
Nos reunimos, charlamos, hilamos versos y somos libres. Somos mujeres, madres, tías, abuelas, hermanas, hijas, escritoras, amantes, trabajadoras, amas de casa, luchadoras, idealistas, soñadoras…
Nuestro hilo es la palabra, el verso nuestra arma y la lengua la artillería que usamos para defendernos.
Somos violetas. Y nos reunimos a tejer palabras con nocturnidad y alevosía. Quien nos quiera escuchar, que nos siga de cerca.
Sed bienvenidas y bienvenidos a esta nueva entrega de nuestro FILANDÓN VIOLETA.
Como buena amante de la poesía, suelo pasear entre las estanterías de las librerías buscando como loca la sección “Poesía”. La mayoría de las veces es deprimente y apenas encuentras algún clásico y un puñado de instagramers publicados por las grandes editoriales. Llevo buscando descubrimientos que me estremezcan, años. La protagonista de este filandón de hoy es uno de los descubrimientos que hice bastantes años antes de ser madre, hace unos veinte años. En una de esas librerías que me gustaba recorrer, vi un libro con una portada maravillosa: una mezcla entre azul y violeta, con un potente corazón anatómico en su centro y una señal inequívoca: “Usted está aquí”. Como siempre hago, lo abrí al azar. Es el testeo que hago. Abro los libros al azar y leo el poema que aparece milagrosamente ante mí. Si me estremece, el libro es irremediablemente mío y he de pasar por caja. Este libro lo abrí en el poema “PUM”. Y me enamoré (poéticamente) de la pluma de Ana. El libro era Alfabeto de cicatrices, de la editorial Baile del Sol. Y desde entonces, fui persiguiendo sus publicaciones y algunos de sus recitales, buscando esa vibración que esta POETA (con mayúsculas) provocaba en mí.
De todas maneras, el poemario que más llevo conmigo, por el momento en que me llegó y por cómo me llegó fue Querida hija imperfecta, de la editorial Ya lo dijo Casimiro Parker. De este poemario me quedo con todos los poemas, pero con uno en particular: Antes de la debacle, un poema donde vi reflejada mi propia debacle, y los sueños de mi hija. Sólo puedo darle las gracias por este poemario. Es una de mis joyas más queridas.
Y tras esta intensa y personal presentación, empecemos con este Filandón Violeta de hoy, con nuestra protagonista. Veamos primero unos breves apuntes biográficos para acercarnos a su persona y saber, un poco al menos, quién es Ana Pérez Cañamares.
Ana Pérez Cañamares
Ana Pérez Cañamares (1968) ha publicado los poemarios La alambrada de mi boca (Baile del Sol), Alfabeto de cicatrices (Baile del Sol), Entre paréntesis (La Baragaña), Las sumas y los restos (Ya lo dijo Casimiro Parker; Premio Blas de Otero-Villa de Bilbao 2012; Finalista del Premio Mandarache 2021), Economía de guerra (Ya lo dijo Casimiro Parker), De regreso a nosotros (Ya lo dijo Casimiro Parker), El espejo discreto, (Pre-Textos; premio Vicente Núñez-Diputación de Córdoba 2016), Querida hija imperfecta (Ya lo dijo Casimiro Parker), La senda del cimarrón (Ya lo dijo Casimiro Parker) y la antología Fricción (Bartleby); las plaquettes A vista de ave (colección Poético y Peatonal), Lo mejor de mí es el mundo que no veo (Las hojas del Baobab) y Será ser mujer (Ediciones del 4 de agosto); el libro de aforismos Ley de conservación del momento (Isla de Siltolá) y el libro de relatos En días idénticos a nubes (Baile del Sol). En 2022, han aparecido Los sietes pareceres (aforismos), en Baile del Sol, y el libro de narrativa La mujer imposible, en La Moderna editorial, sus últimas obras publicadas hasta la fecha.
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Ana Pérez Cañamares es una mujer inquieta, su poesía vibra incluso bastante tiempo después de ser leída. No deja indiferente a quien la lee. Tiene un blog llamado El alma disponible que ya no actualiza, pero que merece, y mucho, la pena consultarlo ya que hay en él mucha información sobre sus libros y sobre autores que le gustan.
Si buscamos su nombre en cualquier buscador, podremos apreciar lo impresionante que es su trayectoria y su huella. Me ha gustado enormemente este artículo Ana Pérez Cañamares: “El feminismo ha llegado tarde a mi vida, pero ha venido para quedarse». – Diario16plus donde habla sin tapujos de feminismo y de escribir siendo mujer. Me quedo con esta cita que resume la necesidad de mantener esta sección que mes a mes comparto con quien tenga la curiosidad de leerme:
Se sigue considerando que nosotras escribimos en los márgenes, mientras que la escritura de los hombres se equipara con lo universal.
Seguimos avanzando en este artículo y os voy a dejar con las afiladas y certeras respuestas de nuestra protagonista a las preguntas habituales en esta sección. Espero que disfrutéis con su lectura y que os hagan reflexionar como a mí.
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¿Qué es para ti la poesía?
La poesía es para mí el asombro que siempre me aguarda.
La lectura de poesía es minoritaria, ¿cómo convencerías a alguien que dice que no le gusta la poesía para que se introduzca en su lectura?
Le diría que en la poesía están todas las preguntas que el ser humano se hace, y que compartirlas proporciona consuelo y compañía.
¿Cómo integras la poesía en tu día a día y en tus obligaciones personales y laborales?
Últimamente lo urgente ha desplazado a casi todo lo demás. Leo y escribo poca poesía. No lo vivo como una pérdida, porque la práctica de la poesía me ha enseñado a mirar. Y mientras me dedico a otros menesteres, sigo con los ojos muy abiertos. La poesía volverá.
¿Qué le dirías a alguien que empieza ahora en el mundo de la escritura poética?
Que lea y que viva. Que repose lo leído y lo vivido. Que escriba después y deje reposar lo escrito. La poesía se lleva muy mal con las prisas.
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La red está inundada de vídeos donde podemos escuchar a nuestra protagonista recitando, de videopoemas, entrevistas y multitud de sitios donde podemos acercarnos a su persona. Me quedo con dos, pero os animo a buscar más y a invertir el tiempo que necesitéis en adentraros en ella.
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A continuación podéis leer una pequeña muestra de su creación poética. Pero como siempre digo, id a sus libros, a las librerías (en cualquier librería que tengáis de referencia seguro que os pueden conseguir ejemplares de alguno de sus poemarios) y en las bibliotecas. Disfrutad y dejaos asombrar.
MUESTRA DE SU OBRA
LAS PIEDRAS
Durante las vacaciones
recogemos las piedras
que el mar nos regala.
Son las piedras con las que luego,
en el invierno, reconstruimos
las ruinas de nuestras guerras.
No sólo les pedimos
que resistan.
También que nos recuerden
que el mar existe
(Alfabeto de cicatrices. Baile del Sol, 2013)
Todas las perras que en el mundo han sido
venimos esta noche a tu ventana.
Sin collares, con pulgas, cicatrices
barro en las patas, sangre en pezuñas
de cada sombra una perra emerge.
Nos quitaron camadas, nos pusieron cadenas.
Nos dejaron sin linaje ni genealogía.
Para poblar sus fincas les parimos esclavos.
Pensaron que abandono sería igual a muerte
pero de las cunetas aprendimos memoria.
Sé fiel a los ladridos: alimenta a tu loba.
Obedece la brújula en tu hocico.
Apunta las orejas siempre al cielo.
No disputes la caza con tu hermana.
No des a luz cómplices: enséñales colmillos.
Y así hallarás en ti lo que tienes de manada.
(La senda del cimarrón. Ya lo dijo Casimiro Parker, 2020)
Dimitir de mí misma
como quien cierra la puerta
a su casero y le dice hoy no pago.
Renunciar a mi representación
porque la piel se me irrita
bajo la baratija de los nombres.
Romperme los papeles
parirme anónima, apátrida
esdrújula de orfandad.
Relevarme la voz
derrotarme los miembros
tumbar mi estatua.
Me destituyo, me revoco
me derroco, me ceso:
implanto en mí el imperio de los pájaros.
(El espejo discreto. Pre-Textos, 2018)
Dónde está la no lengua
que precisa mi memoria
qué pueblo oculto la habla
qué pájaro la silba al extinguirse.
Escribir: azuzar una jauría
que persigue al espectro de una presa.
Escribir: pasear a los recuerdos
con un collar de nubes engarzadas.
Las palabras son bajas de una guerra
que perdemos cada día contra el mundo.
Que no se deja contar, solo se canta.
(Lo mejor de mí es el mundo que no veo. Las hojas del baobab, 23. stabil&studillo editores, 2019)
Y hasta aquí esta pequeña introducción a una POETA con multitud de publicaciones, premios y que seguro que vamos a seguir disfrutando muchos años. Porque aún tiene mucho que decir, no tengo ninguna duda. He de agradecer a Ana Pérez Cañamares su colaboración conmigo, y que hace unos años me dedicara los pocos libros que tras las mudanzas y mi propia debacle personal aún sobreviven conmigo. Forman parte de mi biblioteca más personal, aquella que me acompañará siempre, vaya donde vaya.
TEJIENDO EN LA SOMBRA
Tejiendo y leyendo y escribiendo y viviendo y soñando y amando y… y todo lo que hago siendo todo lo que soy. Ahí estoy yo, detrás de este filandón violeta, intentando sobrevivir en una gran ciudad donde me siento hormiga, leyendo, escribiendo y recitando poesía, siendo madre, trabajadora y poeta de guardia, como decía nuestra querida Gloria. Me llamo Pilar Escamilla Fresco y si quieres saber de mí búscame aquí: www.caradeluna.es
Pero ante todo lee poesía, lee poesía todos los días de tu vida. Y si tienes hijos, léeles poesías. Sin poesía, no hay vida.
MasticadoresFEM / Editora: Mercedes G. Rojo 
link,,, republicado en Masticadores.com
Saludos
juan
https://masticadores.com/2024/03/22/28397/
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