Por Marisa Alonso Núñez
Sección: Mujeres en la Ciencia
Viernes, 21 de enero. 2022
Si piensas en una científica te la imaginas con bata, en un laboratorio, mirando por el microscopio o haciendo experimentos ¿verdad?
Tranquila, para la mayor parte de las personas esa es la imagen que se le viene a mente cuando se imagina a una mujer de ciencia.
Bueno, pues hoy quiero desmontar un poquito esa idea preconcebida que tenemos sobre las científicas.
Y es que la mujer de la que te quiero hablar hoy es de esas personas que se ponen su capa y se lanzan a ayudar al mundo con sus superpoderes: el conocimiento científico y un gran corazón.
El conocimiento hay que ponerlo en acción
Pilar Mateo
Pilar Mateo está en el Top 10 de mujeres científicas de España y en el Top 100 del mundo, pero también es la Mburuvicha Guaz (que significa la gran capitana guaraní) en el Chaco Boliviano.
Valenciana de nacimiento, estudió Químicas para poder ayudar a su padre en la fábrica de barnices que tenía. Pronto se dio cuenta de que la química y los barnices podrían tener otras aplicaciones y volvió a la universidad para hacer el doctorado.
Los primeros barnices y pinturas que desarrolló eran anticorrosivos e ignífugos, pero en seguida pasó a crear un tipo de pintura que marcaría su futuro y el de muchas personas de este mundo: una pintura salva vidas.
Llámame exagerada si quieres. “¿Cómo una pintura puede salvar vidas?” me dirás.
Pues la verdad es que no exagero para nada. Pilar desarrolló un tipo de pintura que contenía, en microcápsulas, productos que mataban los insectos y arácnidos que transmitían enfermedades como la Malaria, el Dengue, el Chagas, el Zika, la Chikungunya o la Leishmaniasis.
Esta tecnología, que patentó con el nombre de Tecnología Inesfly, permite crear revestimientos, o pinturas, de tipo acuoso, donde están inmersas pequeñas cápsulas que contienen en su interior insecticidas o larvicidas, y que van liberando estos productos poco a poco hasta 18 meses después de su aplicación. Estas pinturas no hacen daño ni a humanos ni a animales, pero sin embargo, son letales para los insectos que transmiten esas enfermedades mortales.
De hecho, esta tecnología ha demostrado ser muy eficaz en el control de la Enfermedad de Chagas, que era endémica de Bolivia. Esta enfermedad es transmitida por la picadura de un chinche (llamado Vinchuca), que transporta en su interior el Tripanosoma Cruzi, parásito que produce la enfermedad. El Chagas afecta a unos 25 millones de personas y más de 100 millones tienen un gran riesgo de contraerla.
Esta tecnología se utiliza también en el ámbito de la erradicación de vectores que transmiten enfermedades endémicas como la malaria, el dengue o la Leishmaniasis. Países como Ecuador, Ghana, Benín, Burkina Faso, Costa de Marfil, Bolivia, Bangladesh, Nepal, Colombia, México y Paraguay la aplican hoy en día con éxito.
Fue en Bolivia donde Pilar vivió durante un año. Llegó para ayudarles a luchar contra el Chagas con una pintura que mataba la Vinchuca para aplicar en las paredes de las casas, y se encontró que en la mayor parte de los casos no tenían ni siquiera paredes, así que se puso a construirlas.
Se dio cuenta de que el problema de base en el desarrollo de la enfermedad era la pobreza de las mujeres, que ni siquiera podían luchar por sobrevivir y sacar adelante a sus hijos, como para preocuparse de tener una casa en condiciones adecuadas. Así que decidió volcarse en ellas, en su educación y en su empoderamiento. Con el gobierno en contra, e incluso con amenazas de muerte, siguió trabajando en ello y en 2006 creó la Fundación MOMIM (Movimiento de Mujeres Indígenas del Mundo).
En este vídeo de la Iniciativa “Pienso, Luego Actúo”, retratan de una forma muy clara todo lo que Pilar Mateo significa: ciencia y solidaridad. Son solo unos minutos. Seguro que te llega al corazón.
Si después de todo lo que te he contado no crees que Pilar sea una superheroína de hoy en día, te voy a dar más razones. Abre bien los ojos porque esta mujer no dejará de sorprenderte.
Sus investigaciones han dado lugar a más de 70 patentes en más de 100 países, y con su lema «la ciencia que abraza» (que significa la necesidad de estar allá donde las personas sufren enfermedades) por bandera, ha creado la Fundación Pilar Mateo, que promueve planes integrales basados en tres pilares: control vectorial: (tecnología Inesfly) control clínico y educación en Higiene y Salud.
Además, puso una empresa, llamada Inesfly Corporation, para desarrollar las pinturas insecticidas adecuadas para cada situación y otra, llamada Shichi World, que es una empresa de cosmética centrada en ayudar a las mujeres desempleadas para que puedan convertirse en microempresarias.
Pero no contenta con eso decidió que iba a luchar contra las enfermedades también a través de la televisión: “Explicaré la enfermedad con telenovelas” decía. Para eso creó una productora con la que rodó una Miniserie de 6 episodios titulada “Microasesinos” para el Canal Historia.
El teaser del episodio de la Malaria lo puedes ver a continuación. Seguro que no te deja indiferente.
¿Cómo te has quedado?
Lo sé. A mí también me deja sin palabras. Y por eso ha recibido numerosos reconocimientos a su trayectoria investigadora y a su labor social. Uno de los últimos ha sido protagonizar un mural en su ciudad natal, Valencia, como referente de las Mujeres en la Ciencia.
En España tenemos la suerte de contar con una científica como Pilar, apasionada de la ciencia, y comprometida con la sociedad. Porque como dice ella: “El conocimiento hay que ponerlo en acción”. Y no hay mejor ejemplo del conocimiento puesto en acción que Pilar Mateo.
Marisa Alonso Núñez (Astorga, 1979) es una apasionada de la ciencia y la comunicación científica. Como farmacéutica, bioquímica y doctora en microbiología y biología molecular ha contribuido a la ciencia de formas variopintas.
Como trabajando en laboratorios del Instituto de Biología Fundamental de Salamanca, de la Life Science Faculty en Glasgow (Reino Unido), del Paterson Institute for Cancer Research en Manchester (Reino Unido) y del Vanderbilt University Medical Center en Nashville (Estados Unidos).
También ha enfocado sus esfuerzos en la mejora de la situación de los jóvenes investigadores y de las mujeres en la investigación a través de su trabajo en la Federación de Jóvenes Investigadores y en EURODOC (The European Council of Doctoral Candidates and Junior Researchers), donde coordinó el Grupo de Igualdad de Género y formó parte de su Junta Directiva.
Como enamorada de la ciencia la grita a los cuatro vientos con sus colaboraciones en proyectos de Divulgación Científica como Naukas o Hablando de Ciencia y lleva organizando la Semana de la Ciencia de Astorga con el grupo de Divulgación Científica de Astorga CienciAstorga desde 2012.
Recientemente se ha embarcado en un proyecto precioso que llevaba tiempo pensando: transformar la vida de los jóvenes investigadores transformando la forma de comunicar su investigación. Con el programa Divulgar Ciencia en Tiempos Revueltos, del proyecto Investikando, ayuda a otros investigadores a adquirir las habilidades comunicativas que necesitan para avanzar en su carrera investigadora.
Si quieres saber más o charlar con ella sobre ciencia, comunicación y la propia vida… te espera aquí.
MasticadoresFEM / Editora: Mercedes G. Rojo 
Muchísimas gracias por este nuevo descubrimiento. Cuántas cosas nos quedan por conocer de tantas grandes mujeres. Todo un ejemplo para nuestras jóvenes que todavía están buscando lo que quieren hacer. Gracias, Marisa.
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Un artículo a la altura de la grandeza de esta mujer. Gracias.
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Muchas gracias Marisa por acercarnos conocimientos que de otra forma no alcanzaríamos. Me da una tristeza absoluta ver como los medios de comunicación pierden tantísimas hojas escritas, imágenes reproducidas y horas habladas para manipular nos o no decir nada y sin embargo este tipo de información tan importante en tantos sentidos está enmudecida por esta sociedad que cada día tiene menos cosas buenas…….
Eres grande Marisa.
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No la conocía y me ha impresionado mucho. ¡Gracias por presentármela!
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